Fue en la fiesta de la rosa del PSC en Gavà (Barcelona), en la que no se escuchó la palabra amnistía, aunque este mensaje sobrevolaba en el acto.

Este año, esta fiesta de los socialistas catalanes coincidió con la concentración convocada por el PP en Madrid contra la política de Sánchez respecto a Cataluña. Eso permitió, según trasladan fuentes del PSC a Servimedia, que mientras en Gavà había "convivencia, fiesta" y 15.000 personas -según la organización- para compartir militancia alrededor de una paella, en el de los populares se escucharon gritos y consigas que animan a la “crispación”.

Arropado por gritos de "presidente, presidente", Sánchez tomó la palabra y se mostró seguro de que continuará al frente de un gobierno “progresista” del PSOE con “el partido de Yolanda Díaz” porque “hay números” y buscará los "apoyos hasta debajo de las piedras", aunque no despejó incógnita alguna de cómo ni cuándo lo logrará, solo que espera que sea “pronto”.

"FALLIDO FEIJÓO"

La investidura de Sánchez -que se precipitará una vez concluya la "fallida investidura del fallido Feijóo"- pasa por Junts y el apoyo que sus diputados vayan a dar a Sánchez. Un respaldo que los socialistas solo ponen en duda porque depende de una "sola persona", el expresidente catalán fugado de la justicia española, y por el difícil viaje de sus posiciones pasando de un extremo a otro que debe dar en el partido que lidera Carles Puigdemont.

La duda radica, explican desde el PSC, en que Junts debe pasar de rechazar el diálogo, criticar a ERC por ello y apostar solo por la unilateralidad, a hablar y pactar con el PSOE. Y, además, el acuerdo sería para una amnistía, lo que vendría a suponer cierto reconocimiento, explican, de que lo hicieron mal y les están perdonando.

Pero ninguno de los que tomaron hablaron desde el escenario -Sánchez, Illa y la alcaldesa de Gavà, Gemma Badía- pronunció la palabra ‘amnistía’. Fuentes del PSC apuntaron que ya se verá si hay o no y cómo se llamará. Igual que en las filas socialistas ven complicado que haya renuncia pública de los independentistas a que volverían a intentarlo de manera unilateral.

CERRAR EL 'PROCÉS'

No obstante, en la ecuación los socialistas juegan con la pérdida de poder institucional de Junts tras los últimos comicios- 28-M y 23-J- y que en las elecciones generales los ciudadanos los colocaron como quinta fuerza. Unido todo, dicen, a que el ambiente en Cataluña es de rechazo a la crispación que aseguran que alimenta PP y Vox.

Los socialistas consideran que la amnistía y su debate es un asunto “más de Madrid” y que no está instalado en la sociedad catalana, aunque entienden que lo que se haga debe explicarse “bien”, porque apuestan más por “pasar página”.

Para los socialistas catalanes tras la continuidad de Sánchez en La Moncloa con un pacto político "siempre dentro de la Constitución", remarcan, solo queda afrontar la “última etapa” para cerrar el 'procés' que es la de que Salvador Illa -que ya ganó las últimas elecciones autonómicas- alcance la Presidencia de la Generalitat.