Los análisis realizados en la última campaña por el Centro de Investigación y Control de la Calidad, perteneciente al Instituto Nacional de Consumo, demuestran que solamente un 16,9% de un total de 77 guirnaldas encontradas en el mercado español se adaptan estrictamente a las normas reguladoras.

Un gran porcentaje (81,8%) de las muestras examinadas presentó deficencias en materia de etiquetado y en las marcas e indicaciones que deben acompañar a estos productos. De ellas, un 35% carecían del correspondiente marcado CE.

Por otra parte, comprobaron que un 44% de las guirnaldas estaban realizadas con material de baja calidad, perjudicando la seguridad del producto.

Los responsables del informe afirman que, aunque en relación con los materiales utilizados se ha encontrado una mejoría respecto a las campañas anteriores, la calidad dista mucho de ser satisfactria para las autoridades de consumo.

Por todo ello, recomiendan al consumidor que compre o utilice guirnaldas con el distintivo CE y que contengan las advertencias de seguridad en una lengua del Estado.