Lo hicieron en sendas ruedas de prensa que se solaparon en el tiempo el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, y la portavoz de la Ejecutiva de Podemos, Isa Serra. El primero celebró la renuncia de Rubiales como “una grandísima victoria del movimiento feminista de este país”, que “lo ha cambiado” y por eso España “ya no tolera as machistas y actitudes de violencia sexual” como la sufrida por la jugadora de la selección Jenni Hermoso.

Ahora bien, puntualizó que “su renuncia no es un punto final a nada”, sino que “queda mucho por hacer en términos de reconocimiento del deporte femenino, en términos de igualdad de género, de que no vuelvan a ocurrir casos como éstos”, porque “hay más Rubiales a los que hay que poner freno” y también “quedan muchas cosas también para el reconocimiento del deporte femenino”, como la citada igualdad salarial.

Antes que Urtasun, Serra quiso “dar la enhorabuena a Jenni Hermoso”, sus compañeras de selección y “todas las feministas” porque “por fin Rubiales ha dimitido”. Lo atribuyó a que “somos un país feminista y a que está construyendo más igualdad”.

En todo caso, la portavoz de Podemos objetó que el presidente de la RFEF “se ha ido tarde y mal”, después de “retratar a la perfección lo que es la reacción machista frente a las mujeres que denuncian la agresión sexual y frente a las mujeres que somos feministas y queremos avanzar en derechos para el conjunto de las mujeres”.

Además, puntualizó que “no se ha acabado” y que “hay mucho por avanzar para acabar con el conjunto de las violencias sexuales”, porque la de Rubiales es sólo “la punta del iceberg” y “la gota que colma el vaso”. Pero también para avanzar en la igualdad total, y en este sentido apoyó las reivindicaciones de las jugadoras de la Liga de fútbol para lograr la igualdad salarial. “Esto ha sido un primer paso, que se acabó Rubiales, pero todavía queda mucho y esto no ha hecho más que empezar”, sentenció.