En declaraciones a Servimeda, Romero dijo que esta decisión del Tribunal Europeo parece basarse en que "en una Unión Europea, donde existe libertad de comercio, de bienes y servicios, no se puede establecer esa restricción en la publicidad y el patrocinio de los productos del tabaco".

En su opinión, aunque la decisión del Tribunal Europeo es jurídicamente correcta, el tabaco debe tener un tratamiento especial, por tratarse de un artículo perjudicial para la salud.

Añadió que hay precedentes que avalan ese criterio, como "l directiva de comunicación sin fronteras, donde hay algunas restricciones que se establecen, bien para proteger a menores o para evitar la violencia".