Así se desprende del ‘XII Informe Adecco sobre Empresa Saludable y Gestión del Absentismo’, elaborado por The Adecco Group Institute, en el que se pone de relieve que la tasa de absentismo por incapacidad temporal es del 5,1%, cifra que es una décima inferior al cuarto trimestre de 2022 y 0,9 puntos en comparación con el mismo período del pasado ejercicio.

Si se analiza la jornada pactada y las horas de absentismo del primer trimestre de 2023, Adecco concluye que las horas no trabajadas por absentismo equivalen a que 1.080.676 asalariados no trabajaron durante este periodo.

Por comunidades, las más afectadas son el País Vasco con una tasa de absentismo de un 7,5%, Aragón (7,4%) y Galicia (7,1%). En el otro extremo, las menores tasas de absentismo se localizan en Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana (5,9% ambas), y La Rioja (6%).

Por sectores, la industria y los servicios son los más afectados, con una tasa del 6,7%, mientras que la construcción es el que cuenta con la tasa de absentismo más baja (4,9%).

Teniendo en cuenta divisiones de actividad concretas, se puede establecer que el transporte marítimo y por vías navegables es la que presenta una peor cifra (11%), seguida de asistencia en establecimientos residenciales y actividades sanitarias (10,4% ambas).

CAUSAS DE LAS AUSENCIAS

Por otra parte, la mayor incidencia del absentismo sería por contingencias comunes (enfermedad común o accidente no laboral), ya que el 39% de los encuestados considera que suponen entre mucha y máxima incidencia (+11 puntos interanuales).

En cambio, más del 80% de los encuestados considera que las situaciones de estudio, formación o exámenes, la conflictividad laboral, mal ambiente de trabajo, acoso laboral y efecto aburrimiento (boreout) suponen una mínima incidencia o ninguna.

En paralelo, cuando se les pregunta a las empresas por la experiencia de teletrabajo postpandemia, desde la óptica de la productividad, la mayor parte de las empresas consideran que es buena: cinco de cada 10 encuestados tienen una visión positiva (35%, +9 puntos interanual) o muy positiva (15%) hacia el teletrabajo, frente al 7% que la valoran como negativa, cuando en 2022 era del 11%.

Además, con relación a la gestión de la incapacidad temporal, la vigilancia y promoción de la salud, el 66% de las empresas encuestadas puntúa entre un 9 y un 10 el que debería darse mayor soporte a empresas y organizaciones en aspectos relacionados con la salud mental (+14,8 ppuntos interanual).

El 64% de las empresas está de acuerdo (entre 9 y 10 puntos) con que es necesario potenciar la digitalización de la información para favorecer la portabilidad de la información sanitaria de las personas trabajadoras (+13,8 puntos interanual).

Asimismo, el 73% de las empresas consultadas valora entre 9 y 10 que es necesaria una mayor colaboración público-privada para hacer posible la vigilancia y la promoción de la salud.

Sobre qué tipo de medidas creen necesarias incluir o modificar en la negociación colectiva, la medida con la recomendación máxima es desarrollar programas de promoción de la salud mental y del bienestar emocional específicos para el sector o empresa objeto del convenio con un 34%, seguida de desarrollar medidas de vigilancia de la salud específicas (salud mental, dependencias alcohol y drogas, etc.) para el sector o empresa objeto del convenio con un 28%.

Finalmente, sobre la nueva incapacidad temporal por menstruación dolorosa, el 46% de las respuestas reflejan que la menstruación dolorosa puede generar más incidencia en bajas y ausencias del puesto de trabajo que antes (+6,9 puntos interanual), frente al 20% que recoge que no cambia nada (-2,1 puntos). Asimismo, el 45% de las respuestas reflejan que las empresas aplican complementos a la incapacidad temporal en caso de contingencias profesionales, conforme al Convenio Colectivo Sectorial.