Este proyecto, llamado "Plan Esquila", ha sido elaborado por los miembros de UGT y CCOO del comité de empresa y es una alternativa al propuesto días atrás por la compañía minera, qe prevé el cese de la actividad para el año 1996.

La iniciativa contaría con una primera aportación económica procedente del importe de las extinciones de contrato de los trabajadores, calculado en unos 5.000 millones de pesetas. Con este dinero la nueva empresa abriría la línea del cobre y explotaría otros recursos de minerales polimetálicos que existen en Río Tinto y en toda la franja pirítica onubense.

Además, el "Plan Esquila" incluye una serie de actuaciones de investigación y desarrollo de os recursos de la zona que se llevarían a cabo hasta 1999.

Mientras tanto, los sindicatos UGT y CCOO mantienen la convocatoria de huelga general para mañana, jueves, en demanda de soluciones concretas y urgentes a la crisis de la cuenca minera onubense.