El trabajo en los elementos con riesgo de desprendimiento en las fachadas del inmueble se reanudará en cuanto cese el fuerte viento que se registra en la ciudad, según informó el Ayuntamiento.

El jefe del departamento de Control de la Edificación, Emilio García-Burgos, explicó que la normativa vigente impide que haya operarios trabajando en grúas de gran altura a partir de una velocidad de viento superior a 32 kilómetros por hora.

Este registro del viento no afecta, sin embargo, a los trabajos que no precisan del uso de las grúas gigantes, que se desarrollan con toda normalidad en el interior del inmueble.

La retirada de los elementos que presentaban riesgo de desprendimiento, que se inició ayer y que hoy se ha suspendido, se reanudará cuando las condiciones climatológicas lo permitan.