Los individuos irrumpieron en el local a las 7,45 horas de la mañana, cuando algunos funcionarios estaban abriendo el local y todavía no había público. Tuvieron un pequeño forcejeo con el portero que vigilaba la entrada, a quien le produjeron una "pequeña herida sin importancia", según las mismas fuentes.

Una vez dentro, los asaltantes tomaron algunos rehenes, de entre los 10 ó 12 empleados que habitualmente trabajan en el consulado.

La policía acordonó la calle en la que se encuentra el consulado y finalmente, y tras más de tres horas, los rehenes fueron liberados y los asaltantes han salido del edificio del consulado.