Investigación
Una infección bacteriana en la infancia podría ser la culpable del aumento del cáncer colorrectal en jóvenes
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La exposición durante la niñez a una toxina bacteriana podría estar detrás de la "epidemia" de cáncer colorrectal entre jóvenes, según un estudio internacional en el que ha participado el investigador del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) Marcos Díaz Gay, publicado este miércoles en la revista 'Nature'.
La investigación liderada por la Universidad de California en San Diego (EEUU) y cuyo primer firmante es Marcos Díaz Gay, jefe del equipo de Genómica Digital del CNIO, ha concluido que la colibactina podría estar detrás del aumento del cáncer colorrectal de aparición temprana. "Esta toxina, producida por algunas cepas de Escherichia coli -una de las múltiples bacterias que pueblan el colon y el recto-, y tiene la capacidad de alterar el ADN de las células. El hallazgo ahora publicado descubre que la exposición a la colibactina en la primera infancia imprime una firma genética distinta en el ADN de las células del colon", explicaron fuentes del CNIO.
Los investigadores han llegado a esta conclusión tras la realización de un análisis computacional de mutaciones genéticas, analizando 981 genomas de pacientes de 11 países. Los datos recogidos demuestran un "aumento sustancial de las mutaciones" relacionadas con esta toxina en pacientes con cáncer colorrectal menores de 50 años y confirman que la colibactina deja tras de sí patrones y "firmas mutacionales" que son especialmente prevalentes en países con alta incidencia de cáncer colorrectal en jóvenes.
Las implicaciones de esta investigación son muy relevantes, pese a que los investigadores todavía no han podido responder a algunas de las preguntas clave cómo ocurre la infección y cómo evitarla o combatirla.
Si la tendencia actual se mantiene, el cáncer colorrectal podría ser la principal causa de muerte por cáncer en adultos jóvenes en 2030. "Hasta ahora se desconocía la causa de este aumento. Los jóvenes con cáncer colorrectal no suelen tener antecedentes familiares y presentan pocos factores de riesgo conocidos, como la obesidad o la hipertensión, lo que ha hecho buscar posibles causas entre posibles carcinógenos ambientales o infecciones microbianas", informó el CNIO.
“Cuando iniciamos este proyecto no pensábamos centrarnos en el cáncer colorrectal de aparición temprana”, dice Marcos Díaz Gay. “Nuestro objetivo era examinar los patrones mundiales de cáncer colorrectal para entender por qué algunos países tienen tasas mucho más altas que otros. Pero a medida que profundizábamos en los datos, uno de los hallazgos más interesantes y llamativos fue la frecuencia con la que las mutaciones relacionadas con la colibactina aparecían en los casos de aparición temprana”.
Según destacaron los investigadores, los efectos nocivos de esta toxina traducidos en mutaciones surgen en una fase temprana del desarrollo tumoral, lo que coincide con estudios previos que muestran que tales mutaciones se producen en los primeros 10 años de vida.
"Si alguien adquiere una de estas mutaciones impulsoras a los 10 años" -explicó Ludmil Alexandrov, autor principal del estudio e investigador de la Universidad de California en San Diego- "podría adelantarse décadas en el desarrollo del cáncer colorrectal y padecerlo a los 40 años en lugar de a los 60".
La investigación publicada en 'Nature' destacó también que "hay ciertas firmas mutacionales especialmente frecuentes en cánceres colorrectales de algunos países, en particular Argentina, Brasil, Colombia, Rusia y Tailandia. Esto sugiere que la exposición ambiental local también puede contribuir al cáncer, aunque se desconoce aún a qué factores".
El estudio forma parte del proyecto Mutographs of Cancer - Cancer Research UK Grand Challenge Project, una amplia colaboración de la Universidad de California en San Diego, el Wellcome Sanger Institute y la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer que busca patrones de mutaciones causadas por agentes ambientales, como la radiación UV, las toxinas bacterianas, el tabaco y el alcohol.
(SERVIMEDIA)
23 Abr 2025
MAG/man