La jornada arrancó en la sede de Iberdrola, en el distrito de Hortaleza, liderada por un cabezudo que representaba a Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola.

La ruta marchó después por las sedes de Endesa en Barajas y de Naturgy en el barrio de Salamanca, donde desfilaron también cabezudos de José Bogas y Francisco Reynés, respectivos responsables de estas dos energéticas.

Posteriormente, en la Plaza de las Cortes, ante el edificio del Congreso de los Diputados, se escenificó un "juicio popular” a las grandes energéticas y se pidió la moratoria de la prohibición de los cortes.

Las entidades convocantes, entre las que figuraban la Alianza contra la Pobreza Energética, Ecologistas en Acción, Amigos de la Tierra, Greenpeace, CCOO y la Coordinadora de Pensionistas, advirtieron de de que si no se aprueba esa moratoria, miles de hogares se quedarán sin suministro básico en 2024.

Estas asociaciones piden en primer lugar la prórroga de la moratoria de cortes de agua, luz y gas en hogares vulnerabilizados, y que se avance en hacer permanente la prohibición de cortes en hogares vulnerabilizados en la línea de lo que han propuesto tanto la Comisión como el Parlamento europeos en el marco de la reforma del mercado común de la electricidad.

Además, demandan que todos los impagos desde 2020 asociados a esta medida sean asumidos por las grandes empresas del sector, "cuyos beneficios netos no han parado de incrementarse en los últimos años, como una forma de compensación social, por tratarse de un suministro esencial, con una cartera de clientes asegurada en un mercado altamente rentable y con poca competencia".