Así lo hizo en un comunicado emitido tras la celebración de la segunda edición del Congreso Estatal de Mediación Intercultural, en el que se dieron cita expertos y profesionales procedentes de diversas entidades con el objetivo de “poner en diálogo propuestas, retos y horizontes” desde diferentes ámbitos de la mediación intercultural especializada.

Durante el mismo, su directora, Amaia Echevarría, consideró “necesario y urgente” un “compromiso institucional” con la mediación intercultural y reivindicó la implementación de ésta en los servicios públicos para “garantizar el acceso a todas las personas, así como la profesionalización de esta figura fundamental para el ejercicio de derechos".

En el transcurso del congreso se expusieron las necesidades detectadas por las diferentes asociaciones expertas en mediación intercultural, como la “urgencia” de dicho compromiso institucional, al estimar que la presencia de mediadores en recursos “está dependiendo únicamente de la iniciativa de las profesionales y las entidades”.

Además, se destacó la necesidad de crear redes de trabajo y de generar estudios y estadísticas que “evidencien” el “incumplimiento de derechos” y la “eficacia” de la mediación intercultural para “hacerlos efectivos”. “A esto se suma la necesidad de compartir recursos y crear espacios seguros para los profesionales de la mediación intercultural”, abundó.

EXPERIENCIAS Y BUENAS PRÁCTICAS

Asimismo, durante el congreso se compartieron experiencias y buenas prácticas de mediación intercultural y, en este sentido, Israel López, del Área de Convivencia, Interculturalidad y Desarrollo Comunitario de Fundación Cepaim, se refirió a la mediación intercultural como "un agente transformador desde el que construir comunidad" y presentó el proyecto 'Ciudades mediadoras’, cuyo objetivo es generar alianzas con universidades e instituciones para promover la mediación intercultural desde un lenguaje común.

En la misma línea, la coordinadora del Área de Culturas, Géneros y Sexualidades de UNAF, María de los Ángeles Rodríguez, compartió la experiencia de la entidad en mediación intercultural como recurso en el ámbito de la salud sexual y reproductiva y para prevenir las violencias de género. "Esta figura es imprescindible a la hora de detectar y abordar las violencias de género. Por eso formamos a mediadoras especializadas que entran a formar parte de nuestro proyecto y de los servicios de atención que ofrecemos a las mujeres", explicó.

Por otra parte, la mediadora intercultural de la Federación Red Artemisa Raquel Cortés señaló que la mediación “es un puente fundamental para eliminar estereotipos, facilitar el entendimiento de los códigos culturales del pueblo gitano y acompañar a los menores en situaciones de discriminación escolar”.