Asimismo, la Universidad aseguró que “se cumplirán las especificaciones de las comunidades autónomas donde están implantados y se establecerá además un espacio de 1,2 metros de distancia entre el alumnado” para garantizar la seguridad de la comunidad educativa ante la covid-19.

En un comunicado, la UNED recordó que las previsiones, a partir de los datos de la anterior convocatoria, apuntan a “más de 300.000 exámenes para este año, lo que supone, en algunos centros, como Málaga, Barcelona o Madrid Sur, un aumento de superficie de más del 40%, refuerzo de medidas de limpieza y, en ocasiones, la intervención de un especialista en diseño y ergonomía para recolocar los puestos de examen”.

“Hemos transformado la biblioteca, un espacio de dos plantas, en aula de exámenes”, explica Luis Grau, director de UNED Málaga, que atiende a 5.000 estudiantes, “contratamos una empresa de guardamuebles para llevarse sillas y mesas de estudio y dejar sitio para los puestos de examen. Recuperamos también la antigua librería, un local adyacente que hemos acondicionado y reconvertido en aula".

Además, han aumentado el número de aulas y hay varias salas dentro del edifico principal, y "para garantizar una distribución óptima de los puestos" han contado con un especialista en ergonomía y diseño de interiores. "Todo esto supone más del 40 por ciento de espacio para realizar los exámenes”, añadió Grau.

Aunque la comunidad autónoma andaluza no impone restricciones, ni medidas para la vuelta a la normalidad en las aulas, Grau considera que la inversión en seguridad y salud siempre es necesaria y agradece la colaboración a la Universidad de Málaga (UMA), y a otras entidades como la Diputación, el Ayuntamiento y Fundación Unicaja.

CASA DE LA JUVENTUD

La UNED de Madrid Sur cuenta con más de 7.300 estudiantes. “El 45 por ciento de los alumnos de Grado, Máster y Acceso se va a examinar en la Casa de la Juventud de Parla, nuestro espacio habitual para las pruebas presenciales, y el 55 por ciento restante en el área Javier Tusell, acondicionada al efecto”, explica Ainhoa Rodríguez, directora del centro, que dispone de 13 aulas, con una capacidad aproximada de 325 estudiantes.

La casa de la Juventud puede acoger, con el distanciamiento interpersonal exigido por las autoridades sanitarias, hasta 200 estudiantes, con lo que, según la UNED, "cumple con la normativa de aforos y medidas de seguridad establecida por la Comunidad de Madrid en el caso de los centros universitarios”. Rodríguez también agradece al Ayuntamiento de Parla la cesión del espacio.

La UNED de Barcelona cuenta con 8.000 estudiantes repartidos en cinco sedes, aunque sólo en la de la ciudad condal ha requerido ampliar el espacio, alquilando instalaciones en el edificio CitiLab. “Aunque el Plan Sectorial de Universidades de la Generalitat permite una ocupación de las aulas de hasta el 70 por ciento del espacio disponible, el centro se ajustará a los límites recogidos en el documento elaborado por la UNED", señala Mercè Novellón, la directora.

"Los estudiantes matriculados en la sede de Barcelona se han distribuido en dos grupos, de acuerdo con la letra de inicio de sus apellidos. Un 52 por ciento de estos estudiantes se examinarán en el edificio del centro de Barcelona, el 48 por ciento restante en el CitiLab, edificio municipal de Cornellà de Llobregat".

La experiencia de pruebas de otras convocatorias y que las de este año durarán más días, además del esfuerzo de los equipos garantizarán la “eficacia” del plan, apuntó Novellón.