Según notificó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el margen de intereses creció un 2,9%, hasta los 1.058 millones, y los ingresos por comisiones netas lo hicieron un 7,3% y se situaron en 525 millones. El margen bruto alcanzó 1.584 millones, un 4,5% superior al del ejercicio 2021.

Mientras, los gastos de administración bajaron un 8,2% tras materializarse las sinergias derivadas de los planes de reestructuración previstos, y los saneamientos de crédito se redujeron un 20,8%.

El banco indicó que la mejora del negocio bancario y la reducción de los costes de explotación han permitido constituir provisiones extraordinarias por importe cercano a 50 millones de euros en el último trimestre, “para prever el posible deterioro de la economía derivado del mantenimiento de una inflación elevada”.

En solvencia, el ratio CET 1 ‘fully loaded’ se situó en el 13%, con un exceso de capital sobre los requerimientos regulatorios de 1.622 millones. Por su parte, la rentabilidad sobre fondos propios tangibles (ROTE) pasó del 2,3% en 2021 al 4% en 2022.

RECURSOS DE CLIENTES

En cuanto a los recursos a la clientela, estos ascendieron a 90.081 millones de euros, tras incrementarse un 0,3% en el cuarto trimestre, y el total de recursos administrados fue de 98.178 millones al cierre de 2022.

El crédito a particulares no dudoso se incrementó un 1,8%, tanto en el segmento hipotecario (+1,7%) como en el de consumo (+3,5%), así como del crédito a las administraciones públicas (+3,7%).

La inversión crediticia productiva no dudosa se situó en 52.953 millones, reduciéndose un 1,1%, debido a la ralentización de la concesión de crédito a las empresas, por el acopio de liquidez realizado por estas en 2021 bajo las líneas con aval público.

Las nuevas formalizaciones de préstamos alcanzaron los 10.049 millones, de los que 4.313 millones corresponden a financiación hipotecaria de particulares, lo que supone el 42,9% del total. La cuota de mercado en nuevas formalizaciones hipotecarias se sitúa en el 8% del total nacional (según datos a noviembre de 2022, acumulados de los últimos 12 meses), muy por encima de la cuota natural de Unicaja Banco en el sector bancario español.

La cartera crediticia no dudosa de Unicaja Banco mantiene un bajo perfil de riesgo y se encuentra diversificada: el 59,7% corresponde a financiación hipotecaria, el 24% a empresas, el 10,9% a administraciones públicas y el 5,4% a consumo y otros fines.

Al cierre del ejercicio, la ratio de morosidad se mantuvo estable, en el 3,5%. Los activos con cobertura alcanzaron el 66,5% para dudosos, y el 64,1% para los adjudicados.

En cuanto al plan digital del banco, a cierre de 2022 más del 61% de los clientes eran clientes digitales, suponiendo la captación digital un 32% de los clientes conseguidos, y la aportación de los canales digitales a la contratación continuó creciendo hasta alcanzar más del 30% de los nuevos préstamos al consumo, el 28% de las nuevas cuentas contratadas y más del 23% de las nuevas suscripciones en fondos de inversión y gestión delegada de carteras.