En un comunicado, UPTA valoró los datos de paro del mes de octubre y destacó que tradicionalmente suele reflejar ajustes a la baja en la afiliación de los sectores más expuestos a la estacionalidad y al turismo, como la agricultura o la hostelería. Sin embargo, el conjunto del trabajo autónomo creció respecto a septiembre, impulsado por actividades cualificadas, como los servicios profesionales o la educación.

UPTA aprovechó la ocasión para lamentar que no se haya cerrado aún la negociación sobre las cotizaciones de los autónomos y que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones “crea inseguridad, ruido e incertidumbre al no haber definido ya las cotizaciones definitivas”, puesto que más de 3,4 millones de autónomos continúan a la espera de una decisión.

La organización exigió a lo largo de este mes de noviembre “el cierre de manera definitiva de la negociación para el próximo año 2026”, para la cual propone una subida del 4% para los tres primeros tramos de la tabla reducida, que supone entre ocho euros y 10,40 euros; un 5% para los siete primeros tramos de la tabla general (entre 14,55 euros y 20,75); y un 10% para los tramos ocho y nueve (44 euros y 46,50). “Esto es una propuesta que no trata de castigar al que más gana, sino de equilibrar el esfuerzo y garantizar la sostenibilidad del sistema, puesto que congelar las cotizaciones sería un grave error que puede repercutir seriamente en la protección social del colectivo y en las futuras jubilaciones”, recalcó UPTA.

“Reiteramos la necesidad de definir, clarificar y acordar las cotizaciones del próximo año 2026, para la que hemos presentado una propuesta concreta que establece con claridad la intensidad de subida de cotizaciones, sin reflexiones teóricas sobre los desequilibrios de quienes más ganan y quienes menos tienen, para actuar sin oportunismo”, expuso el presidente de UPTA, Eduardo Abad.