Marín aseguró que las cooperativas no han vendido todavía el 70% de su producción de vno blanco y tampoco buena parte del tinto. En total, unos 13 millones de hectólitros sobre los que industriales y agricultores no se ponen de acuerdo en cuanto al precio.

La corta cosecha de este año como consecuencia de la sequía ha provocado un aumento de los precios del vino español, por lo que los envasadores se han dedicado a importar vino procedente de Argentina y Chile a menor precio.

Las cooperativas afirman que la calidad de este producto importado es muy inferior al nacional, que se est mezclando con vinos españoles y que en ningún caso se advierte al consumidor la procedencia de los caldos, tal y como exige la normativa, lo que califican de "fraude".

Después de ocho reuniones entre productores e industriales, no se ha logrado un acuerdo, si bien los primeros están dispuestos a vender su producción a 52 pesetas por litro, 10 pesetas más que lo que cuestan los caldos importados.

Francisco Marín se mostró convencido de que "el vino se va a vender, pero a menor precio del que se dbiera, por lo que las pérdidas para los agricultores, que han sufrido una fuerte sequía, son seguras".

Marín acusó al Gobierno y a las comunidades autónomas de falta de control para evitar el fraude, por lo que solicitó que el nuevo titular de Agricultura tras las elecciones tome medidas para evitar que esta situación se pueda repetir en la próxima campaña.