En la sesión de control al Gobierno en el Congreso, Olona preguntó a Díaz en qué beneficiará la reforma laboral al sector agrario, después de reprocharla por error que no contestara al secretario general del PP, Teodoro García Egea, una cuestión similar (en realidad, García Egea cambió la pregunta que había registrado y se interesó por el sector del motor, no el agrario), y de engolar la voz para parodiar a la ministra en su frase de que “este Gobierno hace cosas chulísimas”.

Díaz, al señalar el error sobre la pregunta de García Egea, ironizó que PP y Vox tienen “una pugna sobre quién se coloca más a la derecha”, y, respondiendo a la de Olona, contestó que la reforma laboral acometerá la precariedad, “una anomalía de nuestro país” que, dijo, también se da en el campo.

En la réplica, la dirigente de Vox y posible candidata del partido a las elecciones andaluzas recriminó a la “ministra comunista” y en general al Gobierno que, “no contento con criminalizar al sector primario”, también “tratan a los ganaderos como auténticos delincuentes mediante falsas acusaciones de esclavitud y violación de derechos laborales” y de “ser los culplables de su emergencia climática ideológica”, cuando una hora de vuelo en Falcon contamina más que 16.000 vacas.

Ahora, además, continuó, la reforma laboral impone “un cambio de modelo de contratación que no toma en consideración las especificidades del sector agrario” y “se ha hecho a espaldas del campo”, porque “la temporalidad es intrínseca al sector agrario español, lo que no significa precariedad”.

Burlándose de que Díaz “lo más cerca ha estado del campo” ha sido en los supermercados y los campos de golf, la llamó “lady Paro”, auguró que “va a generar la pérdida de miles de empleos agrarios”, anunció que ella estará en una tractorada en Murcia igual que estuvo en la de Salamanca y terminó avisándole de que “no le va a ganar el pulso al mundo rural”.

La ministra contrarreplicó que Olona “confunde la estacionalidad con la precariedad”, y remarcó que en España la temporalidad está en el 57% en la agricultura y la media europea “es 25 puntos menos”. Así, certificó que el modelo de relaciones laborales en el campo español “se aleja de Europa”, y a ello atribuyó el que 14.500 trabajadores andaluces se vayan a la vendimia francesa, con mejores condiciones laborales.

La ministra, finalmente, deseó que un partido que se dice constitucionalista “cuando hay inspecciones en el campo se coloque del lado de la legalidad y no del lado de lo que son irregularidades”. Le recriminó también no haber apoyado al Gobierno en la Ley de Cadena Alimentaria ni en la negociación de la PAC y concluyó que Vox no es “el partido del campo, aunque hoy se vista del campo”, sino que está ”defendiendo a una minoría en el campo que busca privilegios y a veces comete irregularidades”.