Según informó Vox este jueves, atribuyen a Sánchez los delitos de calumnias e injurias, ambos con la circunstancia de agravante de publicidad, y un delito de odio.

El partido denunciante indicó que la querella se presenta después de que la semana pasada la exdiputada afirmara en televisión que Vox es un partido que “prefiere que los niños, en lugar de jugar a mamás y mamás, les ofende más que los niños jueguen a mamás y mamás a que los niños jueguen a maltratar a sus novias y a violarlas”.

La vicesecretaria nacional de Vox, Marta Castro, explicó que, en el escrito presentado en el juzgado, sostienen que la frase que les dirigió Sánchez “de alguna forma incita, permite o soporta lo que son delitos tan graves como el maltrato y la violación”. Además, “hacerlo de forma pública aumenta la gravedad del delito, como dispone el Código Penal”.

“NO TODO QUEDA PERMITIDO”

Del mismo modo, Castro señaló que “las excesivas declaraciones no pueden ampararse en un derecho de libertad de expresión, pues no existe un derecho al insulto, ni tampoco pueden tener acogimiento que se trata de una crítica política, pues no todo queda permitido”.

También advirtió de que las declaraciones de la exdiputada de Podemos y Más Madrid buscan “el desprestigio, la humillación y menosprecio de los ciudadanos frente a los votantes o simpatizantes de Vox y de las personas afines, lesionado su derecho al honor y a la verdad”.

Al mismo tiempo, explicó que, junto a su querella, remiten al juzgado un documento con la posición de Vox respecto a la protección de las mujeres. Se alude a que en este documento se menciona que Abascal ha expresado claramente la posición del partido sobre esta cuestión, pero que “se han mantenido desde su nacimiento en 2013”.