"Es intolerable que se profieran insultos y ataques machistas a la ministra Irene Montero en el Congreso de los Diputados. No todo vale en política. Nuestro país es mucho mejor que el partido del odio", publicó Díaz en su perfil de Twitter después de que Toscano, en la presentación de la partida de presupuestos del Ministerio de Igualdad, llamara a Montero "libertadora de violadores" y atribuyera su cargo público a haber "estudiado en profundidad a Pablo Iglesias".

La ministra pidió expresamente al vicepresidente del Congreso, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, que no retirara del Diario de Sesiones, como advirtió que haría, las palabras de Toscano, para que quedara constancia de "la violencia política y quien la ejerce". También se conjuró a "parar los pies a esta banda de fascistas".

Seguidamente, los diputados de la izquierda ovacionaron en pie a Montero, quien les devolvió los aplausos y abandonó el Congreso visiblemente emocionada. Los de Vox, por su parte, aplaudieron a Toscano.

Ministros socialistas como José Luis Escrivá, al tomar la palabra para presentar sus partidas presupuestarias, y María Jesús Montero , Pilar Alegría e Isabel Rodríguez por Twitter, se solidarizaron también con su compañera de gabinete. Fuentes de Vox consultadas por Servimedia, en cambio, pusieron el acento en que Gómez de Celis quiso retirar del Diario de Sesiones las palabras de su diputada y no la acusación de "fascistas" que les lanzó la ministra de Podemos.

Otro parlamentario de otro grupo consultado por esta agencia tachó de "impresentables" las palabras de Toscano y puntualizó que con ese ataque dan paradójicamente justificación a Montero ante los suyos.