Así se expresó Díaz en el marco de una reunión informal del Consejo de Empleo, Asuntos Sociales, Sanidad y Protección de los Consumidores (Epsco), celebrada en Namur (Bélgica), donde instó a constituir en un derecho la formación para toda persona en edad de trabajar.

Además, la titular de Trabajo abogó por incluir en la agenda social de la próxima legislatura europea asignaturas pendientes como lo son el teletrabajo y el derecho a la desconexión, las prácticas en las empresas o la revisión de la Directiva de los comités de empresa europeos.

En su opinión, hay que ofrecer una respuesta a las demandas en los centros de trabajo y por ello urge aprobar la Directiva de Trabajo en Plataformas Digitales. Asimismo, instó a adoptar una directiva que establezca los derechos de las personas trabajadoras en relación con el uso de la inteligencia artificial y los algoritmos en el trabajo, de manera que la transición digital sea justa.

Asimismo, reclamó “ambición y dotación presupuestaria” para que el nuevo Plan de Acción de la Comisión Europea pueda cumplir los objetivos en materia de empleo, formación y reducción de la pobreza.

Díaz demandó situar el Pilar Europeo de Derechos Sociales, que procura la dimensión social de las políticas europeas, en el centro de la Agenda Estratégica 2024-29 que aprobará el Consejo Europeo.

“El nuevo Plan de Acción de la futura Comisión para la ejecución del Pilar debe tener ambición, contar con iniciativas novedosas y objetivos concretos, tener un respaldo presupuestario sólido para cumplir nuestros objetivos en materia de empleo, formación y reducción de la pobreza”, destacó la vicepresidenta, que pidió que los principios del Pilar Europeo de Derechos Sociales no se queden en meras palabras, sino que se materialicen en derechos reales y efectivos.

Ante el nuevo ciclo electoral que Europa afronta este 2024 con las elecciones europeas, la ministra aseguró que seguirá “siempre remando por lograr nuevas conquistas para las personas trabajadoras y por un mundo del trabajo más decente y con más derechos”.

A la hora de abordar la carencia de mano de obra, un problema que se está evidenciando en algunos países de la Unión Europea, Díaz señaló la relevancia de la formación y ha señalado, en ese sentido, el valor de la Declaración Tripartita sobre el Año Europeo de las Competencias, firmada en Barcelona en octubre pasado con los máximos dirigentes de los interlocutores sociales europeos junto con el comisario de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmit.

Díaz propuso a los ministros y ministras de la UE que en la próxima legislatura europea se apruebe una directiva que reconozca, de forma efectiva, el derecho a la formación en el trabajo y establezca un marco general para el ejercicio y garantía de ese derecho.