Rodríguez Zapatero anunció los cambios en una comparecencia en La Moncloa y argumentó que todos ellos "están ligados a la convicción de que la evolución del contexto político y la situación económica demandan un cambio de ritmo para afrontar con nuevo impulso y mayor fortaleza una etapa que ahora se inicia" y que tendrá un momento especialmente importante en la Presidencia de la Unión Europea, el primer semestre de 2010.

Reiteró que la lucha contra la crisis es la máxima prioridad del Gobierno y una vez que los principales países del mundo han decidido políticas coordinadas, es necesario afrontar ese objetivo con especial "capacidad de iniciativa".

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