Así se pronunció este colectivo en un comunicado ante los guiños que lanzó Cospedal en su discurso de la Pascua Militar a la necesidad de garantizar el “bienestar” de los militares y unas “adecuadas condiciones de trabajo”.

Para lograr este fin, indicó que se presentará durante la primera mitad de este año un Plan Integral de Orientación Laboral y durante el primer trimestre de 2018 el Plan General de Cultura y Concienciación de la Defensa.

ATME consideró que el anuncio de la titular de Defensa no es más que “la continuidad del actual modelo”, al que se añaden unas “hipotéticas nuevas vías profesionales de aquellas personas que, una vez finalizado el periodo de servicio activo, dejan las Fuerzas Armadas, tal y como establecen la Ley de Tropa y Marinería de 2006 y la Ley de la Carrera Militar del año 2007”.

Esta asociación subrayó que los problemas a los que se enfrentan las Fuerzas Armadas “siguen existiendo”: “Una tropa profesional que sale de sus compromisos sin ninguna titulación académica, en contraposición al resto de escalas, y sin ninguna certificación o convalidación oficial del trabajo realizado”; “unas plazas reservadas para este personal que, a excepción de las de la Guardia Civil, no se cubren a pesar de que hay candidatos”; o “plazas de personal laboral del Ministerio de Defensa donde los aspirantes no pueden certificar el trabajo realizado dentro de las Fuerzas Armadas para poder optar a ella”.

A ello, ATME añade la “nula oferta de plazas reservadas” en policías autonómicas y locales y la “no baremación del tiempo servido” en las Fuerzas Armadas a estos efectivos.

Por todo ello, dejó claro que “estará expectante” para que “tras un anuncio a bombo y platillo no se esconda un intento de diluir la lucha asociativa por la plena profesionalización de la escala de tropa y marinería”.