El abogado de Turull, Jordi Pina, hizo estas declaraciones a los medios en nombre de su defendido a las puertas del Tribunal Supremo. Según Pina, Turull le había pedido “encarecidamente” que se dirigiera a Torrent para “pedirle que mantenga el pleno de investidura previsto para mañana, por dignidad ante la injusticia de su encarcelamiento”, y a los diputados “para solicitar en su nombre el voto para que se produzca la investidura, por las mismas razones de dignidad y reprobación ante la injusticia”.

La investidura de Turull fue rechazada ayer por 65 votos en contra, 64 a favor y cuatro abstenciones. En la sesión de mañana, para que la investidura saliera adelante por mayoría simple, que es la que se necesita en la segunda votación, diputados de la CUP tendrían que cambiar su abstención por voto a favor.

El abogado denunció en nombre de su defendido que, después de haber expresado ayer en su discurso de investidura una “postura de diálogo con las instituciones españolas”, con la Monarquía y el Gobierno”, “pese a ello se le manda a prisión, donde difícilmente podrá llevar a cabo ese diálogo”.

Pina reconoció que “no hay tiempo material” para pedir a Llarena que excarcele a Turull para la sesión de mañana, aunque recurrirá la decisión de encarcelarle en los cinco días de que dispone, si bien que el parlamentario y candidato de Junts per Catalunya ya tiene prevista la delegación del voto.