Lambán se reunió en el Palacio de la Moncloa con Rajoy y aprovechó para regalarle unas cuantas docenas de espárragos de Quinto, una de las localidades más afectadas por la riada de esta semana y que ha tenido “efectos devastadores” para la agricultura, la ganadería y los habitantes de la zona.

Pidió a Rajoy que toda esta zona se declare “cuanto antes” de urgente actuación con una dotación presupuestaria “suficiente”. Defendió que lo fundamental ahora es “ponerse manos a la obra” para que ningún agricultor resulte damnificado por lo que le acaba de ocurrir a su patrimonio.

En consecuencia, demandó a Rajoy reponer las estructuras agrarias “destrozadas” y atender al “clamor” de Aragón de acometer la limpieza del Ebro en sus orillas y en su propio cauce. “No se trata solo de ayudas, se trata de inversiones en infraestructuras y sobre todo de limpiar en serio el río”, insistió.

Mientras esta reunión tenía lugar, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, analizaba un informe sobre el estado del desbordamiento del Ebro que será elevado al Consejo de Ministros del próximo viernes para adoptar cuantas decisiones sean necesarias en materia de actuaciones sobre las zonas afectadas por la crecida.