Según informó hoy el Consistorio, esta empresa encargó un estudio de las potencias demandadas durante un año en cada uno de los periodos. De este modo, mediante el uso de algoritmos de optimización, minimizando la variable coste, se concluyó la potencia óptima a contratar.

A continuación, según explicó el Ayuntamiento, “atendiendo a un criterio conservador” para no perder los derechos de acometida cercanos a la potencia instalada en los túneles de Madrid Calle 30, se decidió llevar el periodo tarifario P6, que es el de menor coste, a la potencia máxima demandada. Con esta medida, “se asegura que en caso de emergencia se pueda requerir potencias muy superiores a las contratadas, pagando penalizaciones, en todos los periodos”.

El estudio de optimización de las potencias a contratar en Alta Tensión concluía con un posible ahorro económico de aproximadamente 760.000 euros en la facturación anual por este concepto. Así, tras la elaboración del estudio se solicitó el cambio de potencia de acceso a los valores óptimos.

Estas modificaciones se hicieron efectivas progresivamente desde septiembre de 2017 hasta enero de 2018, obteniéndose hasta el mes de febrero de 2018 unos ahorros reales de 464.000 euros comparando la facturación con años anteriores. Las modificaciones introducidas por Madrid Calle 30, explicó el Consistorio, “siguen la línea de mejorar la eficiencia energética de todas las administraciones municipales”.