Medio marino

El 83% de los municipios mediterráneos retiran las praderas marinas de 'Posidonia' antes del verano

- A pesar de sus beneficios para mantener playas y ecosistemas costeros

MADRID
SERVIMEDIA

El 83% de las localidades costeras del Mediterráneo retira los depósitos de praderas marinas antes de la temporada estival a pesar de los múltiples efectos que estos tienen en el mantenimiento de las playas y de los ecosistemas marinos.

Ésta es la conclusión de un estudio realizado en el verano de 2017 en 144 municipios de cinco países mediterráneos (Chipre, España, Francia, Grecia e Italia) para conocer el estado de las prácticas y las herramientas vigentes en la gestiónde las playas, según informó este lunes la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

El estudio revela que la retirada de los residuos de ‘Posidonia oceanica’ es una práctica común en la mayoría de las playas mediterráneas, principalmente por necesidades estéticas relacionadas con el sector turístico de la región.

‘Posidonia oceanica’ es una planta marina que forma extensas praderas submarinas en el mar Mediterráneo. Durante las tormentas de invierno, sus hojas y raíces aparecen en las orillas y con frecuencia forman gruesas matas mezcladas con arena, denominadas arribazones.

Sin embargo, las autoridades locales suelen retirar estas capas en primavera y en verano debido a la alta presión ejercida por el turismo costero, a pesar de que éstas protegen las playas de la erosión y desempeñan un papel fundamental en el mantenimiento de ecosistemas vulnerables como las dunas costeras, protegidas por la legislación europea.

“Se sabe muy poco de las consecuencias que pueden ocasionar ciertas prácticas del mantenimiento de las playas. Sin embargo, sabemos que los depósitos formados por las praderas de ‘Posidonia’ actúan como un escudo que evita la pérdida de arena en las playas, y asegura la resistencia y la estabilidad del litoral”, afirmó María del Mar Otero, experta marina del Centro de Cooperación del Mediterráneo de la UICN, con sede en Málaga.

7.000 TONELADAS

El estudio indica que al menos el 83% de los municipios analizados retiran cada año los depósitos de praderas marinas y los arribazones en algunas o todas las playas donde se encuentran. En general, los arribazones se van retirando según las necesidades y se llegan a a alcanzar las 7.000 toneladas de retirada al año en algunos lugares. Esta cifra llega a triplicarse en más de la mitad de las localizaciones.

En cuanto a las herramientas utilizadas, la maquinaria pesada, como las excavadoras, es la primera elección en alrededor de un 40% de los casos, y lo mismo sucede con la maquinaria ligera, como los separadores de limpieza de playa. Ello a pesar del fuerte impacto que este tipo de maquinaria podría tener en las playas y en todo su entorno costero.

“Estamos intentando demostrar que las hojas de las praderas marinas que acaban en las playas son beneficiosas y no deberían retirarse porque ayudan a la recuperación de arena, a luchar contra la erosión costera y a la revitalización de las playas”, declaró Maria Eugenia Giunta Fornasin, de la Entente Interdépartamentale de Démoustication Méditerranée (Francia).

Una vez que los arribazones se retiran, los métodos de eliminación varían: un 26% de los municipios los depositan en un vertedero, mientras que en un 20% de los lugares estudiados las hojas se utilizaban para otros usos o se conservaban en algún lugar cercano al entorno costero para luego ser depositadas en su ubicación original al final de la temporada turística. Todas estas estrategias conllevan un impacto distinto.

El estudio se realizó en el ámbito del proyecto Interreg Med, denominado Posbemed, que tiene por objetivo la gestión de conflictos y oportunidades relacionados con los depósitos de ‘Posidonia oceanica’ en el litoral mediterráneo, particularmente en las áreas costeras protegidas y los hábitats de la red Natura 2000.

(SERVIMEDIA)
14 Mayo 2018
MGR/man