El Rey llegó a las 12.00 horas vistiendo el uniforme de capitán general del Ejército del Aire, mientras que la reina Letizia lucía un dos piezas de color rosa palo con estampado de flores.

La llegada de los Reyes fue recibida por una salva de vivas a España y a la Corona por las aproximadamente 50.000 personas que abarrotaron las calles de Logroño, según fuentes municipales. La ciudad cuenta con una población estimada de 150.000 habitantes, que desafiaron al mal tiempo y a la lluvia que afectaron a la capital riojana durante las últimas horas. De hecho, las inclemencias meteorológicas redujeron ligeramente el desfile aéreo preparado para esta jornada al no volar los aviones apagafuegos y dos helicópteros.

A su llegada a la calle General Vara de Rey de Logroño, los Monarcas fueron recibidos por el jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), general Fernando Alejandre, y por la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal.

Al acto también asistieron el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido; el presidente de La Rioja, José Ignacio Ceniceros; la alcaldesa de Logroño, Concepción Gamarra; el jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra (Jeme), general Francisco Javier Varela; el jefe de Estado Mayor de la Armada (Ajema), almirante general Teodoro López Calderón; el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire (Jema), general Javier Salto; el portavoz de Defensa de Podemos, Juan Antonio Delgado; el político socialista César Luena; y otras autoridades civiles y militares.

El acto central del Día de las Fuerzas Armadas tuvo como lema ‘Nuestra misión, tu libertad’ y contó con un izado de bandera, un homenaje a los que dieron su vida por España en el que participaron once militares que cuentan con la Cruz al Mérito Militar, Naval o Aeronáutico y de la Guardia Civil con distintivo rojo –máxima condecoración por actos de servicio-, un desfile aéreo con 54 aeronaves y un desfile terrestre del que formaron parte 2.678 efectivos y 147 vehículos.

Entre los aviones que participaron en el desfile destacaron los ‘Eurofighter’, los ‘F-18’ y el flamante avión ‘A400M’ y entre los vehículos participaron los carros de combate ‘Leopardo’ y los ‘Pizarro’.

El acto también contó con un desfile terrestre del que formaron parte efectivos de la Brigada Paracaidista, veteranos, reservistas, una compañía motorizada, la Legión, que estuvo acompañada por su singular mascota -el carnero-, los Regulares y una compañía a caballo. En esta ocasión, una de las novedades fue el desfile de la gendarmería francesa junto a la Guardia Civil.

Al término del desfile, los Reyes saludaron a las autoridades civiles y militares presentes en el acto, mientras la multitud congregada en las calles de Logroño coreaba al unísono sus nombres.

Posteriormente, el Monarca invitó a todos los españoles a brindar y homenajear a “aquello que más nos une: España”, y alabó a los militares, a los que destacó como una “parte muy importante” de la sociedad, agradeciéndoles su labor diaria en defensa de la libertad y la seguridad de los españoles.

Los actos organizados este año con motivo del Día de las Fuerzas Armadas tuvieron un coste aproximado de 733.796 euros, el doble que el año pasado, cuando se destinaron 366.000 euros a estos fastos, que tuvieron como epicentro Guadalajara.