El Ejecutivo ha fijado en 125.064 millones de euros el ‘techo de gasto’, lo que supone un 4,4% más que el límite de gasto no financiero de los Presupuestos de 2018, que quedó en 119.834. En valores absolutos se eleva en 5.230 millones.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, destacó que el objetivo del Gobierno es permitir un mayor gasto para que la recuperación económica llegue a todos los ciudadanos y garantizar los servicios esenciales que ofrecen las distintas administraciones.

Además, indicó que la modificación de la senda de estabilidad presupuestaria se ha hecho con el acuerdo de la Comisión Europea y siguiendo las previsiones de organismos como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). “La Comisión Europea lo que hace para 2018 es constatar que los Presupuestos de este años incumplían los objetivos y que la senda de estabilidad del anterior Gobierno no era creíble”, aseguró.

La nueva senda establece un objetivo de déficit del 1,8% para 2019, cinco décimas mayor que el anterior objetivo del 1,3% que había sido fijado por el anterior Gobierno del PP. En concreto, se espera que sea del 0,4% en la Administración central, del 1,1% en la Seguridad Social y del 0,3% para las comunidades autónomas, con equilibrio en las entidades locales. Según los cálculos del Gobierno, este aumento supondrá un aumento de 6.000 millones en el gasto del conjunto de las administraciones, en comparación con el anterior objetivo.

De cara a 2020, el objetivo para el conjunto de las administraciones públicas será del 1,1%, con un reparto del 0,1% para la Administración Central, del 0,1% para las comunidades autónomas, del 0,9% para la Seguridad Social, y equilibrio presupuestario para las corporaciones locales.

En cuanto a 2021, el objetivo es que el déficit sea del 0,4% y que este recaiga exclusivamente en la Seguridad Social, mientras que se espera que el resto de administraciones tengan equilibrio.

DEUDA

En lo que se refiere a los objetivos de deuda, para 2019 se situaría en el 96,1% del PIB, con un reparto del 70,1% para la Administración central y la Seguridad Social, del 23,7% para las comunidades autónomas, y del 2,3% para las corporaciones locales.

En 2020 el objetivo global sería del 94,1%, con un 68,9% para la Administración Central y Seguridad Social, un 23% para las autonomías, y un 2,2% para las corporaciones locales. En 2021, el objetivo de deuda se sitúa en el 91,5%, con un 67,2% para Adminsitración Central y Seguridad Social, un 22,2% para comunidades autónomas y 2,1% para las corporaciones locales. En cuanto a la regla de gasto, la tasa de referencia nominal para 2019 será del 2,7%, mientras que en 2020 sería del 2,9% y en 2021 del 3,1%.

TRAMITACIÓN PARLAMENTARIA

Una vez aprobado el techo de gasto por el Consejo de Ministros, la próxima semana se remitirá al Congreso de los Diputados y al Senado junto a los objetivos de estabilidad presentados en la rueda de prensa.

La Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera determina que los objetivos de estabilidad han de ser aprobados tanto por la Cámara Baja como por el Senado, pero no así el 'techo de gasto', que se presenta tan sólo a modo informativo y no necesita recibir la validación parlamentaria.

En este sentido, Montero explicó que en caso de que el PP utilice su mayoría absoluta en el Senado para rechazar los nuevos objetivos de deuda y estabilidad, habría que seguir con la senda fijada anteriormente por el PP, pero que el nuevo techo de gasto “prácticamente se mantendría inalterado”. Concretamente, según la ministra, el límite de gasto no financiero y los PGE de 2019 se verían afectados en unos 1.200 millones de euros, ya que el nuevo reparto de los objetivos relaja sobre todo la contención del gasto de la Seguridad Social y a las autonomías, y no de la Administración central.

En cualquier caso, la ministra criticó la posición del PP, que en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) de ayer ya votó en contra de la nueva senda, al considerar que es “ideológica” y que demuestra que “el PP no cree en lo público”. “Sería difícil de explicar por el PP por qué no permite aquello que nos permite la Comisión”, afirmó en este sentido. Por ello, la titular de Hacienda aseguró que la no aprobación de la nueva senda perjudicará sobre todo a comunidades autónomas y Seguridad Social.

Por otro lado, preguntada por el apoyo de otras formaciones políticas, en concreto de Unidos Podemos, Montero indicó que representantes de dicha formación habían reclamado que el aumento del ‘techo de gasto’ fuera superior al del PIB nominal, y que el aprobado por el Consejo de Ministros cumple con ello, por lo que espera su apoyo a la senda.