Según informó este martes la organización, los participantes han visitado playas y piscinas así como parques de atracciones, han realizado excursiones y paseos en barco y han tenido la oportunidad de conocer museos y lugares de interés cultural en destinos como Oviedo, Lardero, Villanúa, Estella, Pamplona, Burgos, Hondarribia o Sanxenxo.

Merced a este programa, todos ellos “ven mejorada su socialización, su independencia y su calidad de vida, las familias pueden descansar del cuidado y las personas voluntarias viven de cerca la discapacidad intelectual, una experiencia personal y formativa muy valorada por todas ellas”, subrayó la directora del Servicio de Tiempo Libre de Gorabide, Maite Fernández.

A lo largo del año, este proyecto, enfocado hacia un modelo de vacaciones participativas, ofrece 445 plazas para personas con discapacidad intelectual y 130 para personas voluntarias entre el 2 de julio y el 27 agosto. En total, veinte viajes de dos semanas de duración a doce destinos que son elegidos, entre otras cuestiones, teniendo en cuenta la accesibilidad de las instalaciones.

Los tres últimos grupos, integrados por 60 personas con discapacidad intelectual y 25 voluntarios, partieron este martes hacia Oviedo, Lardero y Zarauz y regresarán a su lugar de origen el próximo 27 de agosto.