Este colectivo emitió un comunicado con motivo del primer aniversario de los atentados de Barcelona y Cambrils que segaron la vida de 16 personas y dejaron más de un centenar de heridos.

Afirmó que lo “prioritario” ha de ser la “defensa, protección y reparación de todas y cada una de las víctimas” por parte de las diferentes instituciones para evitar que “ninguna quede fuera”.

Subrayó que el Ministerio del Interior debe reconocer “a todas y cada una de las víctimas”, aunque alguna de ellas presente la documentación fuera del plazo legal de un año establecido, y le invitó a tener “mayor flexibilidad” en el reconocimiento de la condición de víctima del terrorismo, puesto que las secuelas psicológicas de los ataques pueden tardar en aparecer.

También mostró su deseo de que el procedimiento judicial no se vea “enturbiado” por “injerencias políticas” y anheló que durante el juicio no surjan “teorías de la conspiración”, como ocurrió con los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid.

Por último, confió en que el trabajo de los jueces para que “dictaminen lo que consideren de justicia tanto para las víctimas como para los responsables de los atentados”.