Marlaska se refirió a esta cuestión en la Comisión de Interior del Congreso, donde la cuestión del acercamiento de etarras se trató junto a lo referido a la política de inmigración y el cese del responsable de la UCO de la Guardia Civil.

El titular de Interior confirmó el anunció del Gobierno de que se harán traslados de etarras cumpliendo la legalidad, pero acusó al PP de hacer “críticas falsas” sobre ello y propagar el “odio”, ya que hasta el momento sólo se ha movido de cárcel a dos terroristas de la ‘vía Nanclares’ y que han accedido al tercer grado.

Se trata de Olga Sanz Martín y Javier Moreno Ramajo, que a comienzos de agosto fueron trasladados a una cárcel vasca. Ambos están condenados por haber intentado asesinar al exconsejero vasco de Interior Juan María Atutxa y al expresidente del PP vasco Carlos Iturgaiz.

Ante las críticas del PP y Ciudadanos, el ministro explicó que “claro que va a haber acercamientos”, pero dijo que “se están estudiando individualmente” y se harán con criterios de legalidad.

203 ESTARRAS EN RÉGIMEN CERRADO

A este respecto, el ministro aludió a que el pasado 25 de febrero el Gobierno de Mariano Rajoy ya pidió a las cárceles que informasen de cuestiones de los presos etarras como su grado penitenciario, permisos y situación en general. Según Marlaska, esto son algunos de “los parámetros que se tendrán en cuenta para los traslados” que quiere llevar a cabo el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

Marlaska también se refirió a que, a fecha de 22 de agosto, había en las cárceles vascas 233 presos etarras, de los cuales 205 son hombres y 28 mujeres. Además, 203 están en régimen cerrado o tercer grado: 28 están en régimen ordinario o segundo grado; y 2 en tercer grado o abierto, que son los ya citados Olga Sanz Martín y Javier Moreno Ramajo.

Al mismo tiempo, el ministro remarcó que el a cercamiento de presos no es un beneficio penitenciario, ya que este segundo conlleva una reducción de la pena y sus condiciones están tasadas en el Código Penal.

Por su parte, la diputada Mari Mar Blanco, en nombre del PP, sostuvo que el acercamiento de presos etarras era un “pago a los nacionalistas” de Sánchez tras apoyarle en la moción de censura.

Para la representante popular, “la normalización de la situación en el País Vasco no es acercar a los presos, no es dar beneficios a quienes no muestran arrepentimiento alguno”, sino que la “historia” del terrorismo etarra tenga presentes los conceptos de “memoria, dignidad y justicia” para las víctimas.

“PEAJE A LOS FILOETARRAS”

Asimismo, Miguel Gutiérrez, de Ciudadanos, sostuvo que con el acercamiento de presos etarras lo que Sánchez hace es pagar “peajes a los independentistas, filoetarras y batasunos” que le llevaron al poder. Por este motivo, este diputado demandó al presidente que se deshaga de esta “hipoteca” renunciado a “gobernar España a cualquier precio”.

El diputado del PSOE David Serrada señaló que el PP ha elegido un “mal camino” al usar políticamente la cuestión de los presos de ETA, ya que Marlaska ya ha dado “explicaciones claras” de lo que está haciendo el Ejecutivo.

Al mismo tiempo, el diputado del PNV Mikel Legarda acusó al PP de estar usando los acercamientos de etarras como un “arma arrojadiza”, algo que este representante nacionalista considera que los populares hicieron en su momento con el terrorismo de ETA.

Este diputado también señaló que los traslados de cárcel no son acercamientos y que el Gobierno debe diferenciarlos. De la misma posición fue la parlamentaria de Bildu Miren Beitialarrangotia, quien dijo que los traslados no son “privilegios”, al tiempo que sostuvo que unos 100 etarras deberían ser excarcelados por enfermedad o por su evolución penitenciaria.

Asimismo, Rafael Mayoral, de Podemos, se refirió a que la dispersión de presos etarras “ni formaba parte de la pena ni del resarcimiento a las víctimas” y que hay que tener en cuenta que es un “hecho” que ETA ya “no existe”.