Ésta es la primera liberación formal de niños que lleva a cabo el CJTF desde septiembre de 2017. Entonces, y tras su inclusión en un listado anexo al informe anual del secretario general de la ONU sobre los niños y los conflictos armados, el CJTF firmó un plan de acción que le compromete a tomar medidas para poner fin y evitar el reclutamiento de niños.

"La liberación de estos niños del CJTF muestra el compromiso de implementar lo dispuesto en el plan de acción y de defender el derecho internacional humanitario, las leyes de derechos humanos y otras legislaciones regionales y nacionales, protegiendo los derechos de los niños", dijo Pernille Ironside, representante adjunta de Unicef en Nigeria y copresidenta del Grupo de trabajo de las Naciones Unidas en el país la supervisión y presentación de informes sobre violaciones graves de los derechos de los niños (CTFMR, por sus siglas en inglés).

Ironside indicó que esta última liberación es “un hito importante para terminar con el reclutamiento y el uso de niños”, si bien añadió que “todavía hay muchos más niños que permanecen en las filas de otros grupos armados, ya sea en funciones de combate o de apoyo”. “Hacemos un llamamiento a todas las partes para que dejen de reclutar niños y permitan a los niños ser niños", añadió.

Desde que se firmó el plan de acción, los miembros del CTFMR iniciaron un ejercicio de verificación sobre el terreno para determinar la presencia y asociación de niños dentro de las estructuras de mando y los rangos de las Fuerzas Conjuntas Civiles. Hasta la fecha, se han identificado 1.469 menores (1.175 niños y 294 niñas) asociados a las Fuerzas Conjuntas Civiles dentro de la ciudad de Maiduguri.

Unicef subrayó que sigue colaborando estrechamente con las autoridades estatales para apoyar la implementación de programas de reintegración para los niños liberados hoy, así como la de otros niños afectados por el conflicto en curso.

Desde 2017, Unicef ha apoyado la reintegración social y económica de más de 8.700 niños liberados de grupos armados, ayudando a localizar a sus familias, devolviéndoles a sus comunidades y ofreciéndoles apoyo psicosocial, educación, capacitación profesional y educación no formal, así como oportunidades para mejorar sus medios de vida.