Navarro estuvo junto a Díaz durante el escrutinio, aunque este lunes no podrá estar en la reunión de la dirección regional por encontrarse en el Congreso de los Diputados, como integrante de la Mesa, participando en la reunión de la Mesa de la Cámara y en la Jornada de Puertas Abiertas.

En los pasillos del Congreso, pidió analizar los resultados de manera "reposada" aunque reconoció que no puede estar "contenta" porque, evidentemete, los resultados del PSOE no son "los que esperábamos", si bien fue el partido más votado. En todo caso, subrayó, en democracia "no hay que dudar nunca del voto" porque los ciudadanos siempre votan "en libertad".

Expresó por ello su "respeto más absoluto" por el resultado, y reclamó no hacer análisis "en caliente" sino con "seriedad" sobre la premisa de que el fin último de los partidos políticos es mejorar la vida de los ciudadanos, y de que el PSOE siempre ha sido responsable, cuando ha tenido mayorías absolutas, cuando ha necesitado apoyo de otros y cuando el resultado, como el de este domingo, pese a ser mayoritario "dibuja otro escenario".

Además de precisar que "todo está abierto", Navarro compartió el llamamiento de Díaz sobre el hecho de que, "a través de un ámbito democrático, entran a formar parte de parlamentos aquellos que quieren acabar con los parlamentos". "Eso también hay que tenerlo en cuenta", apuntó.

Sobre la posibilidad de que Susana Díaz permita que gobierne otro partido, Micaela Navarro aseguró que no le corresponde hacer ese análisis pero es la candidata con más escaños y con "bastante diferencia" sobre los demás, y "la más apoyada" por los andaluces. En todo caso, insistió, "no quiero aventurar nada porque no me corresponde".