El líder de los populares lanzó este aviso desde Teruel, donde apoyó al presidente del PP aragonés, Luis María Beamonte, en su presentación como candidato a la Presidencia del Gobierno de Aragón.

Subrayó que la Constitución es “el paraguas de un futuro compartido” y “no es un problema, sino una solución”, ya que ejerce de “muralla” frente a quienes quieren romperla y es “vacuna” para combatir “el radicalismo”.

Defendió, por tanto, que la Constitución “sigue viva” y reclamó directamente al Gobierno que “deje de jugar” con la Carta Magna. “Si no tienen apoyos internos, que se busquen otro invento”, reclamó el líder del PP.

Esgrimió que “no parece muy lógico en plena ofensiva de nacionalistas” que se quiera “entretener” a la ciudadanía proponiendo de nuevo una reforma constitucional cuando “no es urgente”. “¡No hay que inventar la rueda o volver a descubrir la pólvora!”, enfatizó.

Casado, convencido de que el actual texto constitucional “funciona”, sí se mostró a favor de la reforma para eliminar el término “disminuidos” y cambiarlo por "personas con discapacidad". “Ya lo sabemos, no nos tienen que explicar qué tenemos que hacer en el uso del lenguaje y las políticas favorables a la discapacidad”, indicó.

Así, dijo que no aceptará “ninguna” lección del PSOE porque en este momento no se puede “abrir en canal” la Constitución “con la que está cayendo en Cataluña” y teniendo en cuenta que Podemos ya ha dicho que pediría un referéndum para validad dicha reforma.

Adujo que “no es serio” que un Gobierno sustentado por un partido con 84 escaños, que “no puede ni aprobar leyes”, venga otra vez a proponer una reforma constitucional que suponga “abrirla en canal”. “

"No lo sometamos a un debate doctrinario que ponga en riesgo nuestra estabilidad solo por la debilidad de un Gobierno”, demandó, antes de sentenciar que “ya está bien de jugar con la Constitución solo para beneficio del PSOE”.