La compañía destinará los fondos a amortizar totalmente la deuda financiera no convertible derivada de un crédito sindicado firmado en abril de 2015, del que quedan 12,9 millones remanentes, y a financiar el crecimiento orgánico e inorgánico previsto en su 'Plan de Negocio 2018-2020', según ha detallado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La transacción se cierra tras recibir Amper y ATH la preceptiva aprobación final del Comité de Inversión Extranjera de los Estados Unidos (Cfius), último permiso que le restaba para completar una desinversión que empezó en el año 2016.

El precio de la transacción se había fijado originalmenente en 79 millones de dólares (69,43 millones de euros) en el momento de la firma de la transacción, en septiembre de 2016, cuando Amper obtuvo ya 26 millones de dólares en anticipo. En abril de 2017 ingresaría otros cuatro millones adicionales a cargo de la transacción.

En total son 30 millones en concepto de adelantos, que hacían que ahora le quedase por ingresar 49 millones; pero el precio final de la transacción se encontraba sujeto a una revisión en el momento de su cierre definitivo que ha elevado la cuantía en casi un 14%.

Dicha revisión del precio estaba ligada a los movimientos de fondos producidos durante el tiempo que tardase en ejecutarse la transacción entre cualquiera de las sociedades afectas y la compañía vendedora, y según cómo variase además la posición financiera neta de las sociedades afectadas entre el cierre contable de 2016 y la fecha final de culminación de la venta.

En virtud de ambos factores se produce la mejora del precio en 11 millones de dólares extras, al haber mejorado "drásticamente" la posición financiera neta de las sociedades que se enajenan, explica Amper al regulador de los mercados.

Las autorizaciones obtenidas son firmes y no precisan ningún periodo ulterior de revisión, alegaciones o recurso. Tampoco necesita autorización o permiso adicional, de forma que la operación se cierra así definitivamente por las cuantías apuntadas.