Así se desprende de un informe elaborado por Randstad con datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), en el que apunta que estas conversiones se incrementaron un 23,2% con respecto al año anterior, cuando se convirtieron en indefinidos un total de 574.644 contratos temporales. Este aumento es el mayor registrado en la última década.

El estudio también analiza el peso de los contratos convertidos a indefinidos respecto del total de contratos indefinidos. En este punto, Randstad llama la atención sobre la tasa alcanzada durante este ejercicio del 36,6%, la más elevada desde 2012. En 2011, el 41,5% de los contratos indefinidos provenían de una conversión.

Por sectores de actividad, más de la mitad de los contratos indefinidos realizados en industria proceden de una conversión (el 52%), siendo el sector que alcanza la mayor tasa. A continuación se situaron la construcción (43,6%), los servicios (34,8%) y la agricultura (20%).

En términos absolutos, el sector servicios es donde se realizan más conversiones de contratos temporales a indefinidos, con 531.449 en lo que va de año.

Atendiendo al incremento interanual por comunidades autónomas, Andalucía (+45%) y Asturias (+37,6%) fueron las regiones donde más subieron las conversiones entre enero y octubre, y Baleares (+8,4%), Canarias (+11,8%) y Cataluña (+11,9%) donde menos se incrementaron.