Según informó el Consistorio, la duración de este servicio podrá ser de dos años contados a partir del 1 de mayo de 2019 y se prevé que pueda ser prorrogable por otros dos. La ayuda a domicilio engloba un conjunto de prestaciones para dar cobertura a las necesidades y a la atención social de personas mayores y/o con discapacidad no dependientes que se encuentren con limitación para la realización de alguna de las actividades básicas de la vida diaria. De esta manera, el Ayuntamiento pretende “facilitar la autonomía en su propio domicilio, el desenvolvimiento y permanencia en su entorno habitual”.

La segunda teniente de alcalde y concejala responsable del área de Servicios Sociales, Susana Mozo, señaló este viernes que “en Alcorcón realizamos una gran inversión para que los vecinos de la ciudad con alguna necesidad puedan mejorar su calidad de vida o autonomía”. Durante 2018, apuntó, “conseguimos que todos los mayores y personas con discapacidad no dependientes de la ciudad que hubieran solicitado este servicio pudieran acceder a él”.

El servicio dispone de dos prestaciones básicas, que son la atención personal y las atenciones domésticas, otorgándose ambas, solas o de forma mixta, y en base al criterio técnico de los trabajadores sociales, que valoran la necesidad de atención para la cobertura de las actividades básicas de la vida diaria de cada persona solicitante del servicio, adaptándolo a los apoyos que se precisen.

El resto de las condiciones específicas de la prestación del servicio, así como la cuantía del coste a cargo del usuario, se regulan a través de ordenanza municipal, explicó el Ayuntamiento.