"No me consta ninguna presión", afirmó la ministra en declaraciones a los medios de comunicación antes de participar en la clausura del Spain Investors Day, que organiza Estudio de Comunicación.

Cuestionada sobre su preocupación y la del Gobierno sobre el escándalo, reconoció que "cualquier acto, cualquier situación que pueda dañar la reputación de una institución financiera es un tema serio". "Pero se trata de un asunto que está encauzado desde el punto de vista penal y es ahí donde se dirimirán la posibles responsabilidades", precisó.

En el Gobierno siguen con atención la evolución del caso destapado por 'moncloa.com' y El Confidencial, que considera que "tiene un coste reputacional que no es positivo" para la entidad.

Una opinión que circula en los mercados, donde se especula sobre la continuidad de González, quien fue relevado en la Presidencia del BBVA a finales de 2018 por Carlos Torres, pero continúa vinculado al grupo como presidente de honor y de su fundación.

La entidad celebrará la próxima semana un Consejo de Administración donde podría despejarse su situación, según algunos medios.

La Audiencia Nacional entró ayer de lleno requiriendo a 'moncloa.com' y El Confidencial el material sobre la contratación por parte del banco de la agencia Grupo Cenyt, vinculada al excomisario.

La información apunta que Villarejo habría intervenido más de 15.000 conversaciones de miembros del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, así como a empresarios y periodistas en los años 2004-2005 para el banco, entonces presidido por Francisco González, y coincidiendo con el intento de Sacyr de hacerse con el control de BBVA.

Los hechos están bajo análisis de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), del Ministerio del Interior y del propio BBVA. Carlos Torres, quien tomó el relevo de González en la Presidencia del grupo hace escasas semanas, confirmó la contratación de Grupo Cenyt en una misiva interna a la plantilla donde aseguraba que no han hallado pruebas hasta ahora de espionaje o pinchazos telefónicos.

En el mismo escrito afirmaba que si se confirman actuará "con la contundencia necesaria". Según algunos medios, el próximo Consejo del banco podría pedir la desvincluación de González o invitarle a causar una baja voluntaria.