En el discurso que pronunció en la Convención Nacional que los populares celebran este fin de semana en Madrid, Aznar reconoció “el coraje y el acierto” que tuvo Casado para dar un paso al frente “cuando el partido lo necesitaba”.

El ex jefe del Ejecutivo y presidente de FAES se mostró seguro de que a partir de ahora Casado “no dará un paso atrás en esa responsabilidad que el PP ha puesto sobre sus hombros” y que, además, es “histórica”.

Dicho esto, hizo un paralelismo entre sus inicios en política y los del actual líder. Recordó que hace casi 30 años un joven que entonces tenía 37 años, la misma edad que Casado, llegó a la Presidencia del PP y que también venía de Ávila.

“La diferencia de ese joven –refiriéndose a él− y el joven de hoy es que Pablo Casado es mucho más listo y sabe mucho más de política”, dijo ante la atenta mirada del presidente popular, que se sonrió al escuchar estos elogios.

“UNIR Y SUMAR”

Sin embargo, quiso dejar claro a Casado que “ninguno” de sus antecesores lo tuvo “tan difícil” como él lo tiene. Aun así, trasladó toda su confianza en que Casado sabrá responder “a este gran compromiso”.

“Creo que no solo tenemos un gran presidente den el PP, tenemos un gran líder y un líder como se ha dicho con acierto, ‘sin tutelas ni tutías, y un líder como un castillo”, trasladó Aznar, lo que provocó un sonoro aplauso y derivó en que todos los asistentes se pusieran en pie para ovacionar a Casado.

No fue el único momento en el que logró levantar a todo el auditorio, pues también lo consiguió cuando pidió de manera nítida el voto para el PP, escudándose en que es "el seguro de cambio". "Desde aquí lo pido", dijo para "no dejar nada a la interpretación".

Así, Aznar dio un apoyo cerrado a Casado en la tarea para “unir y sumar” y que “cada vez más españoles” se puedan reconocer en el proyecto del PP. Remarcó que hay que luchar para que los españoles van “de nuevo su sitio en esta gran casa común”.

Esta “gran casa común”, destacó Aznar, está asentada sobre los pilares del pasado, del presente y del futuro, de España y de la libertad. “¡Viva España!”, finiquitó el expresidente desde el escenario, al que inmediatamente se subió Casado para acompañarle.