Rumí realizó estas declaraciones en la toma de posesión de la nueva presidenta del Foro para la Integración Social de los Inmigrantes, la catedrática y activista Cristina Blanco.

En su intervención, Rumí se dirigió a los 30 miembros que componen el plenario del foro para pedirles "todo el tiempo que podáis dedicar" a la elaboración del plan estratégico, a fin de "agilizarlo y tenerlo listo en el menor plazo posible". "Es importante que el próximo Gobierno, sea del color que sea, no tenga excusas para poder desarrollarlo", recalcó.

De ahí su petición a los miembros del foro, uno de los organismos implicados en la elaboración de dicho plan, en el que también intervienen otros ministerios, las comunidades autónomas y los ayuntamientos.

"Tenemos la obligación de dejar un legado consistente, que fomente la integración, para hacer de este país un país de la defensa de la dignidad de las personas, comprometido con los derechos humanos y volcado con la acogida y la integración de los que vienen a convivir con nosotros", apuntó la secretaria de Estado.

En su opinión, este plan estratégico tiene que ser "un instrumento útil" para promover la integración de inmigrantes y solicitantes de protección internacional a partir de los principios de conviviencia, interculturalidad e inclusión.

Indicó que la reactivación del Foro para la Integración Social de los Inmigrantes demuestra el compromiso del Gobierno de "volver a poner en la agenda pública" estas políticas. "Está llamado a ser parte del antídoto contra los discursos populistas y nacionalistas que algunos quieren instalar en nuestro país", dijo.

PETICIONES

Por su parte, Blanco apostó por "desmentir las ideas que no son ciertas" y poner en valor la "convivencia entre personas diferentes". "Tenemos que hacer un esfuerzo adicional en estos momentos por clarificar las ideas y contrarrestar esos discursos que están basados en cosas que no son ciertas o medias verdades", dijo la experta en migraciones.

Por ello, manifestó, es necesario "dar información veraz" para luchar contra esos discursos y "trabajar mucho en las aulas (la idea de) que todos somos iguales".

"Hay una percepción muy negativa de que los que vienen de fuera van a destruir lo nuestro, pero lo nuestro es la creación con ellos", concluyó Blanco.