Así lo anunció la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, este viernes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que indicó que el reconocimiento de un régimen especial para Baleares contribuirá para compensar la insularidad de esta región y contribuir así al adecuado equilibrio económico entre las distintas regiones del país.

Según explicó la portavoz, el Consejo de Ministros por un lado ha aprobado un real decreto ley con las medidas más urgentes, reconociendo el factor de insularidad de Baleares y estableciendo un instrumento financiero “para garantizar que Baleares reciba inversiones estatales para situarse al menos en la media del conjunto de las comunidades autónomas”. Esta dotación, indicó Celaá, se incluirá en los Presupuestos Generales del Estado y servirá para financiar a Baleares en ámbitos “especialmente afectados por su insularidad”.

Asimismo, el real decreto establece medidas para compensar el transporte marítimo y aéreo de pasajeros, bonificando hasta el 75% de las tarifas de los trayectos entre Baleares y el resto del territorio nacional. Además, también contempla la actualización de tarifas en el transporte de mercancías.

El real decreto contempla también medidas en el ámbito energético, promoviendo las energías renovables en el archipiélago balear y la promoción de una segunda interconexión con la Península. En esta misma línea, se garantiza también que los precios de energía eléctrica, gas natural y gases licuados sean equivalentes a los establecidos en el territorio peninsular.

MEDIDAS FISCALES

Por otra parte, el paquete de medidas aprobado por el Consejo de Ministros para el régimen especial de Baleares contiene una rama fiscal que se configurará a través de un anteproyecto de ley que contempla dos nuevos incentivos para las empresas que operan en el archipiélago.

Por un lado, se plantea la creación de una reserva general para inversiones que permitirá a las empresas un ahorro tributario en el Impuesto de Sociedades. En concreto, aquellas empresas que destinen parte de sus beneficios en Baleares a dicha reserva para futuras inversiones, gozarán de una deducción del 90% en dicho tributo. En segundo lugar, el anteproyecto incluirá una bonificación del 10% en el impuesto de sociedades y en el IRPF por rendimientos derivados de las ventas de bienes producidos en Baleares.