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Día del Padre

Family Watch: “La ausencia paterna está detrás de la mayoría de los casos de delincuencia juvenil”

- Un estudio de la entidad señala que cuando falta un padre, el niño “es menos empático, tiene más agresividad" y más probabilidad de fracasado escolar

(AVISO: esta noticia amplía y sustituye a la publicada este mediodía con el titular 'Family Watch dice que los hijos sin padre son menos listos y propensos a la delincuencia')

MADRID
SERVIMEDIA

El ‘think tank’ The Family Watch puso de relieve este martes la figura del padre en la familia y aseguró que “la ausencia paterna está detrás de la mayoría de los casos de delincuencia juvenil”, al tiempo que vinculó la falta de un referente masculino en el crecimiento de los hijos a un menor “cociente intelectual” o mayor “fracaso escolar” de los menores.

Según dio a conocer en la presentación del informe ‘La importancia de la figura paterna. Consecuencias en la educación de los hijos’, encargado por la entidad a la profesora de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) María Calvo, en España hay más de un millón de hogares monomarentales “en los que las mujeres se hacen cargo de todo” y sin la figura de un padre.

La investigadora destacó en la rueda de prensa que estas madres deben realizar un esfuerzo mayor y, a la vez, se enfrentan a una situación con más vicisitudes que el resto. Como datos, esgrimió que más del 50% de las familias monoparentales están riesgo de pobreza y sus empleos tienden a ser más precarios.

En consecuencia, Calvo advirtió de las consecuencias negativas que puede conllevar la ausencia de la figura del varón. “El padre parece ser que no es prescindible. Los datos científicos vienen a corroborar esta situación. Cuando falta un padre, el niño es menos empático, el niño tiene menos capacidad de sentir compasión, tiene menos autocontrol, tiene más agresividad, el niño tiene menos cociente intelectual”, afirmó en referencia a una mayor probabilidad de fracaso escolar.

“La ausencia del padre está asociada a insidiosos efectos a largo plazo en el desarrollo psicosexual de los hijos; informan de actitudes inapropiadas hacia los roles sexuales, tendencia a la promiscuidad y dificultades en las relaciones de pareja”, recoge en la página 33 el estudio elaborado por esta experta.

Entre sus conclusiones, se incluye que, cuando los padres se separan y el hijo o hija no vive con el padre, la relación entre ellos “acaba desapareciendo”, aun cuando -según la investigadora- “está demostrado que las relaciones de apego padre-hijo son tan fuertes como con la madre”.

De hecho, según expone María Calvo en su estudio, la figura paterna equilibra el crecimiento de los hijos. Como ejemplo de sus afirmaciones, citó las revueltas juveniles de 2011 en Tottenham (Inglaterra), donde “el 50% de los arrestados no tenían padre” o, en caso de tenerlo, estaba ausente o no ejercía como tal; o que “el 75% de jóvenes en centros de desintoxicación” crecieron sin una figura masculina, achacando su conducta a la falta del progenitor varón.

EL DESARROLLO INTELECTUAL

Preguntada por su afirmación sobre el fracaso o abandono escolar de los niños y niñas que crecen sin figura paterna, Calvo explicó que el rol de la madre tiende a infantilizar al menor, mientras que el del padre tiende a hacerlos crecer antes de tiempo al estimular conversaciones sobre la “política” o la “economía”, según dijo la profesora de la UC3M y autora del estudio, que compareció junto a la directora general de The Family Watch, María José Olesti.

Para Calvo, hay “un desarrollo intelectual que las madres frenamos porque nosotras seguimos adaptándonos al mundo infantil y les seguimos manteniendo en ese mundo infantil y no permitimos que crezcan. El padre le hace crecer y le hace esforzarse” al darle más autonomía, pues a él “le preocupa menos los sentimientos del hijo y no le importa llegar a casa y que los hijos estén presentes, aunque tengan cinco o siete años, y se pone a hablar de política y de economía”.

Eso, sostuvo la profesora, “es fabuloso para la mente de un hijo y para su cociente intelectual”, así como el desarrollo de su inteligencia, porque “está ampliando sus horizontes y su capacidad de lenguaje”. No obstante, Calvo insistió en que todo esto son “generalidades” que demuestran varios estudios consultados para la elaboración del informe.

Durante la presentación, puso de relieve que el ‘think tank’ pretende “revalorizar la paternidad desde la corresponsabilidad” y apostó por apoyar la colaboración con la madre tanto si los padres viven juntos como si no. “El padre es imprescindible en el hogar” tanto como la madre, defendió Calvo, ya que “ser padre no es ser un mero procreador o abastecedor”.

En relación a la equiparación de permisos de paternidad con los de maternidad aprobados por el Gobierno en 16 semanas, se mostró favorable pero insistió en que el permiso del padre debe servir para el cuidado de los hijos.

Cuando en la familia falta la figura del padre, Calvo recomendó compensarla con otra figura masculina y, como ejemplo, citó al expresidente de Estados Unidos Barack Obama, que creció sin la figura del padre pero contó a su alrededor con su tío y un profesor de rugby como “referentes masculinos” que “rellenaron ese vacío” y cubrieron ese “hándicap”, ya que considera que cada sexo es complementario al ofrecer distintas cosas.

Preguntada sobre los hijos que crecen en familias de lesbianas, María Calvo recomendó ante la ausencia de un varón “una formación”, como se hace en Estados Unidos, Alemania o los países nórdicos, para que estas madres se repartan los roles, de forma “que una ejerza un papel paterno y otro el materno”, y que así se complementen. “Yo me atrevería a decir que en el caso de homosexuales o en el caso de lesbianas habría que estudiar la posibilidad de una formación para que uno de ellos ejerza, digamos, un papel materno y otro un papel paterno”, afirmó la experta, que puntualizó que estos dos roles deben estar claros también en familias de heterosexuales o de hombres homosexuales.

El estudio de The Family Watch sostiene, además, que las niñas que crecen sin padre “suelen embarcarse antes en relaciones sexuales, embarazos tempranos y divorcios”, si bien matizó que no se debe generalizar. Por eso, desde la organización se pidió valorar la figura del padre desde el punto de vista social, cultural, político y laboral, porque “un padre no es una madre bis”. “Esos hijos que crecen sin un modelo masculino equilibrado, luego tienden a radicalizar los estereotipos, tienden a ser machistas y agresivos”, zanjó.

(SERVIMEDIA)
19 Mar 2019
GIC/PAI/gja