Así se desprende de un estudio publicado este martes por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre los tiempos de espera en ocho compañías analizadas y según el cual, además, en función de la especialidad el intervalo de tiempo de espera para obtener una cita oscila entre 12 y 19 días de media.

Para la realización de este estudio, OCU llamó a la consulta de 2.254 médicos seleccionados al azar y especializados en traumatología, oftalmología, urología, dermatología, cardiología, ginecología y digestivo, siete de las especialidades con mayor lista de espera del sistema público y pertenecientes al cuadro médico de Adeslas, Sanitas, Asisa, DKV, Axa, Mapfre, IMQ y Fiatc.

Según el informe, la espera media más corta es de ocho días para las consultas de oftalmología y traumatología en Adeslas, mientras que los usuarios de IMQ deben esperar de media 28 días para una cita de ginecología y 29 para una cita de digestivo.

La espera media más alta correspondió a Fiatc, con 17 días, e IMQ, con 19. En todas las especialidades, las listas de espera son, según OCU, “sensiblemente menores” que las que existen en la sanidad pública, que, “en el mejor de los casos es de 48 días como media a nivel estatal”, puntualizó la organización.

Entre otros casos, el estudio, que ha analizado la situación en Madrid, Barcelona, Sevilla, Bilbao, Valencia, Cáceres, Pontevedra, Cuenca, Soria y Teruel, destaca el de Bilbao, donde la espera para obtener una cita es prácticamente igual para casi todas las compañías, algo que no ocurre en otras ciudades, donde “puede variar bastante”, y a pesar de que la espera media del sistema público de salud en el País Vasco es de las más breves (22 días).

Las elevadas listas de espera para acceder a la atención especializada en la sanidad pública están entre las principales razones por las que los usuarios acceden a la sanidad privada, a pesar de que la cobertura de sus prestaciones es “muy inferior a la del sistema público”, según señaló OCU

La organización señaló que en la actualidad casi 12 millones de españoles tienen contratado un seguro privado, que cuesta de media 650 euros para una persona de 45 años y exigió una “mayor transparencia” por parte de estas compañías que, a su entender, “deberían publicar datos comparables sobre la espera real que sufren sus clientes a la hora de recibir sus servicios”.