Así lo detalló este jueves la entidad, que en el conjunto de los países donde opera registró un beneficio neto de 1.119 millones de euros en el primer trimestre del año, un 8,7% menos frente a los 1.225 millones del periodo comparable en 2018.

En lo que respecta a España, la entidad indicó que más de 2.216.000 de sus clientes tienen a ING como banco principal con la Cuenta Nómina, cifra que supone un 8,8% o 179.326 usuarios más que un año atrás.

Dicha evolución se ve reflejada en los fondos gestionados, que alcanzaron los 65.038 millones de euros y registran un crecimiento interanual del 8,4% frente al mismo periodo del año anterior.

En financiación (créditos hipotecarios y consumo), el banco contabilizó un aumento interanual del 18,5%, hasta los 18.735 millones, mientras que el ahorro gestionado en inversión (fondos de inversión, planes de pensiones y bróker) subió un 3,3%, hasta los 10.531 millones.

En paralelo, la entidad redujo la tasa de morosidad del 0,87 al 0,86%, una de las más bajas del sector financiero.

ING, que en 2019 cumple veinte años de su aterrizaje en España, subrayó que ha ido adaptándose a las necesidades cambiantes de los usuarios, tanto en canales como en productos.

En banca mayorista, concedió un préstamo sostenible (sustainable improvement loan) a la inmobiliaria Colonial por importe de 75,7 millones de euros. Se trata del primer préstamo de este tipo en el sector inmobiliario español y la primera transacción sostenible de Colonial. Asimismo, durante el primer trimestre ha actuado como banco colocador en la emisión del bono híbrido verde de Iberdrola por 800 millones de euros y en el bono sostenible a diez años de la Comunidad de Madrid.