El último resumen climatológico mensual de la Aemet, hecho público este jueves, indica que abril fue un mes muy húmedo con una precipitación media en España de 96 litros por metro cuadrado, casi la mitad más de lo que cae habitualmente. En concreto, se registró un 48% más del dato medio, que es de 65 litros por metro cuadrado teniendo en cuenta como periodo de referencia el comprendido entre 1981 y 2010.

Llovió más de lo normal en gran parte de la península y el oeste de Canarias. El exceso de lluvia supuso algo más del triple de lo habitual en un área que abarca la mitad sur de la Comunidad Valenciana y gran parte de Murcia, así como las provincias de Albacete y Granada, y el doble en el sureste de Galicia, el este de Castilla-La Mancha, el este de Madrid, el sur de Aragón, la provincia de Soria, el este de Extremadura y Andalucía oriental.

Por el contrario, no llovió ni la mitad de lo que suele caer normalmente en la desembocadura del Ebro, zonas de Mallorca y Menorca, y el este de Canarias.

Las mayores precipitaciones diarias de abril se registraron el día 19, con 99 litros por metro cuadrado en el Aeropuerto de Alicante-Elche, 78 en la Base Aére a ee Alcantarilla, 64 en la Base Aérea de Albacete y 47 en Alicante, y el día 18 en Teruel, con 54 litros por metro cuadrado, y en el Aeropuetto de Valencia, con 49. Todos ellos suponen valores máximos de sus correspondientes series y, por tanto, nuevos récords.

También hubo récords de precipitación mensual más alta en un abril desde que hay datos en la Base Aérea de Albacete (139 litros por metro cuadrado), el Aeropuerto de Alicante-Elche (186) y Murcia (123).

TEMPERATURAS

Por otro lado, abril fue, en el conjunto de España, normal en cuanto a temperaturas, con una media de 13,0ºC, que justamente coincide con el promedio del mes entre 1981 y 2010. De esta forma, el mes pasado se convierte en el sexto abril más frío desde comienzo del siglo XXI.

Abril resultó ser un mes de contrastes térmicos espaciales y temporales que, al contrarrestarse entre sí, dieron paso a un mes con valores en las medias. Así, tuvo un carácter frío en la mayor parte del centro y el sur de la España peninsular y Canarias, muy frío en el este de Castilla-La Mancha y el noreste de Andalucía, cálido en algunas regiones del tercio norte de la península y normal en el resto.

También se caracterizó por la alternancia de sucesivos episodios fríos y cálidos, y se observó una notable oscilación de las temperaturas a lo largo del mes.