La eurodiputada del BNG y candidata a la reelección Ana Miranda quiso aprovechar que el Día de Europa coincide con el arranque de la campaña de las europeas para reclamar para España una posibilidad que, dijo, “funciona en otra partes de Europa”. Eso evitaría problemas e irregularidades como las ocurridas con el voto exterior en las generales, de las que aseguró que Ahora Repúblicas recibió más de 1.000 quejas.

Enumeró que hubo cartas de censo y papeletas que no llegaron a tiempo, que en algunos lugares faltó papel y que la web se colapsaba y daba errores, el hecho de que muchos residentes en el extranjero tuvieran que desplazarse e incurrir en gastos para votar y, además, denunció que para compensar esos defectos “de forma electoralista se amplió el plazo para votar”, cuando “los plazos tienen que ser rigurosos”, sólo que “se tienen que garantizar los recursos” necesarios.