En un encuentro con empresarios en Santander, el líder de los populares pidió apoyo para que el presidente del Gobierno en funciones y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, no tenga “patente de corso y carta blanca” tras el 26-M negociar con quien quiera y “subir los impuestos cuando quiera”.

“Ahora se vota un contrapeso a un previsible Gobierno de Sánchez con los ruinosos gestores de Podemos, que ya han arruinado Venezuela, Grecia y todos los ayuntamientos en los que han gobernado”, advirtió Casado, para a continuación alertar de que “todos los sectores están preocupados”, tanto el primario, como el industrial y servicios, por la marcha de la economía.

En este punto, dijo que espera que “no se le complique mucho la investidura” a Sánchez, ya que es “previsible” que pueda llegar al Gobierno, y resaltó la importancia de que los ayuntamientos y autonomías tengan otro color político ante “el infierno fiscal que nos espera” y que “va a ser insoportable”.