En unas jornadas sobre movilidad organizadas por Prisa, Bogas señaló que para que este desarrollo del vehículo eléctrico se llegue a producir hay que aumentar su autonomía, debe bajar su precio y se deben instalar un número importante de puntos de recarga.

A este respecto, el consejero delegado de Endesa defendió que se están produciendo avances en estas tres barreras y en el caso del precio destacó que el coste de las baterías se puede reducir a la mitad en cinco años por el efecto escala.

Además, sostuvo que una vez adquirido, el vehículo eléctrico resulta mucho más barato que uno de combustión y estimó que el ahorro llega a ser de entre cinco o seis veces con respecto a un automóvil convencional.

Dicho ahorro se explica porque el vehículo eléctrico es tres veces más eficiente que uno de combustión, lo que le permite consumir un tercio de combustible. Además, apuntó que “a pesar de lo cara que está la electricidad es mucho más económica que la gasolina”.

Por otro lado, pidió “un impulso decidido” a la Administración para facilitar que la gente pueda tener en su casa un punto de recarga. En concreto, pidió que los consumidores no deban pagar por el incremento de potencia necesario para cargar el vehículo, puesto que si se lleva a cabo este proceso por la noche no tiene impacto en la red.

Por último, destacó que Endesa ha lanzado un plan para implantar 108.000 puntos de recarga en cinco años, 8.500 de ellos de acceso público. Con ello, se cubrirán 15.000 kilómetros de autovías, con un punto de recarga cada cien kilómetros como mínimo.