Juicio Procés

El vicepresidente de la Generalitat denuncia un juicio con la condena ya “decidida” que busca “criminalizar al independentismo”

MADRID
SERVIMEDIA

El vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, denunció este miércoles ante las puertas del Tribunal Supremo que juzga a los líderes del 1-O la prisión “injusta” de los acusados, que supone una “pena anticipada” que parecer estar ya “decidida” por la sala y que persigue “criminalizar al independentismo”.

La sesión de este miércoles será previsiblemente la última del juicio del `procés´. Por este motivo se han desplazado a la sede del Supremo distintas personalidades desde Cataluña. Además de Aragonés, asistirán a la vista el presidente de la Generalitat, Quim Torra; la portavoz de ERC, Marta Vilalta; el portavoz parlamentario de esta formación, Gabriel Rufián, y otros dirigentes como Diana Riba o Isaac Perarire. En representación de JuntsxCat, estarán el vicepresidente del Parlament, Josep Costa, y la portavoz parlamentaria Laura Borràs.

Aragonès dijo a los medios de comunicación antes de acceder a la sala de vistas que "hoy es el último día de un juicio tras 600 días de una prisión preventiva que es injusta, injustificada, que es un cumplimiento anticipado de la pena, de una pena que parece que ya está decidida”.

A su entender, esta idea ha quedado patente a lo largo de estos cuatro meses: “Lo hemos visto en la Fiscalía, con un relato artificial y que persigue unos objetivos políticos de criminalizar al independentismo. Aquí no hay ni rebelión, ni sedición, ni malversación. Y esto ha quedado acreditado en el juicio".

(SERVIMEDIA)
12 Jun 2019
SGR/ICG/caa