López explicó que a Podemos le interesaría gestionar las consejerías por las que más hemos apostado desde el punto de vista programático”, y enumeró concretamente las de Movilidad y Energías Renovables, Vivienda, Turismo y Trabajo, Industria y Comercio o Agricultura, Pesca y Medio Ambiente. Todo a la espera de cómo se configure el organigrama y de si Més entra o no finalmente en él.

En cualquier caso, recalcó esa “voluntad férrea” de Podemos de entrar en el Gobierno de Francina Armengol, en el que ya estuvo junto a Més y el PSOE en la legislatura anterior, y después de que Més se levantara de la mesa de negociaciones al exigir de nuevo tres consejerías pese a su descenso de seis a cuatro diputados. Ante este retroceso, el PSOE estimó que la exigencia “no era razonable”.

López no quiso entrar en ese conflicto entre el PSOE y Més y se limitó a constatar que son los socialistas, como fuerza más votada, quienes tienen que buscar “un encaje donde los tres nos sintamos cómodos”, y que trabajará por “un Gobierno con el PSOE donde Podemos sí esté dentro”.

Fuentes socialistas consultadas por Servimedia confirmaron la voluntad del PSOE de reeditar el Ejecutivo de coalición de la legislatura pasada, que podría ser el segundo de esta índole tras el valenciano, al frente del cual fue investido ayer Ximo Puig y que incorporará vicepresidentes y consejeros de Compromís y Podemos.

Otros gobiernos autonómicos donde podría influir Podemos están perdiendo fuerza. En Aragón, el PSOE y el PAR firmaron ayer un acuerdo con vocación de “centralidad”, y los socialistas y Podemos se reunirán el lunes, según informaron a esta agencia fuentes del partido. En Asturias, el PSOE también se inclina más a Ciudadanos.

En La Rioja, las negociaciones se centran por el momento en las elecciones municipales, con la previsión de que Podemos entre en el gobierno de Haro, entre otras localidades, según indicaron a Servimedia desde esa federación del partido.