En concreto, el 24,8% de los solicitantes de asilo que recibieron ayuda de Cruz Roja eran venezolanos. Tras ellos se situaron los procedentes de Colombia (12,2%), Ucrania (8,6%) y Siria (6,4%). El 40% de las personas atendidas fueron mujeres y el 23% tenían menos de 18 años.

Según recalcó Cruz Roja, muchas personas que buscan refugio en la Unión Europea son "rechazadas en las fronteras, sin tener en cuenta ni su situación, ni la necesidad de garantizar su seguridad y protección". Esto contradice uno de los principios fundamentales de la Convención sobre Refugiados de 1951 y, junto a la escasez de vías legales, implica mayores riesgos para la seguridad de las personas refugiadas.

Cruz Roja Española es una de las organizaciones que participan en la gestión del programa de acogida a personas solicitantes de protección internacional en España, financiado por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social y el Fondo de Asilo, Migración e Integración de la Unión Europea.

La intervención de Cruz Roja consta de varias fases, que cubren desde la primera acogida hasta la integración y la autonomía de los participantes, con una duración aproximada de 18 a 24 meses.

Para ello, diseña itinerarios personalizados de inserción sociolaboral que atienden las necesidades básicas de este colectivo, con servicios de apoyo jurídico, psicológico, traducción e interpretación, aprendizaje del idioma, ayudas económicas, formación, orientación e intermediación laboral, entre otros.

Con el objetivo de concienciar sobre los retos y dificultades que afrontan los solicitantes de protección internacional en España, Cruz Roja ha lanzado la campaña de sensibilización 'Ahora que están aquí, #TeNecesitanCerca', que dispone de una web, un juego interactivo e infografías para explicar cómo funciona el sistema de acogida y cómo se puede colaborar en su integración.